Juan Antonio Araujo, Abogado defensor de los siete empleados del Bar-Bar que están arraigados, aseguró que el futbolista Salvador Cabañas traía ya problemas con José Jorge Balderas Garza, alias el “JJ”, presunto agresor del futbolista, y que por ello entraron al baño para discutir las diferencias.
El Abogado agregó que la PGJDF cometió algunos errores al iniciar las investigaciones, no revisó exhaustivamente los videos y por ello pasaron por alto hechos importantes que pueden verse en las cintas, por lo que pedirá a la dependencia que levante el arraigo de los empleados.
“El personal cometió errores, como el no revisar a todos, pero de allí a acusarlos de coparticipación de homicidio doloso, calificado, es demasiado”, dijo.
La defensa pedirá que se difundan en una diligencia pública, los 10 minutos previos a la agresión de Cabañas, que están captados por las cámaras del establecimiento, con ello se podrán dar argumentos para liberar a los siete empleados inculpados en el delito de homicidio doloso.
Araujo adelantó que los videos muestran que Salvador Cabañas y el “JJ” tuvieron alguna diferencia y por ello fueron al baño para arreglar las diferencias, ya que el paraguayo ingresó al baño a las 5:08 horas y después hizo lo mismo a las 5:17 horas, no por razones fisiológicas.
“Evidentemente no fue por necesidades fisiológicas, y todo el evento se reduce a los últimos 10 minutos, de las 5:08 a las 5:20, queremos que todos los vean”.
Según el Abogado, la segunda vez que Cabañas entra a los sanitarios, una de las cámaras capta cuando Balderas Garzza recibe de uno de sus escoltas o conocidos un objeto, probablemente el arma, que se coloca en la cintura.
Araujo también mencionó que pedirá a la PGJDF que vuelva a tomar declaraciones de las bailarinas cubanas, ya que no quedaron grabadas en el Sistema de Averiguaciones Previas (SAP), de la dependencia, sino en procesador de textos común, con lo que podrían ser alteradas.
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