El mejor golfista del mundo, el estadounidense Tiger Woods, será sometido a un tratamiento de al menos cuatro meses sin relaciones sexuales, para disminuir su adicción al sexo.
Incluso, el deportista no podrá satisfacer sus deseos de manera personal según el manual del tratamiento.
Woods firmó un contrato de celibato donde se compromete a seguir órdenes y a escribir una carta de reconciliación para recuperar a su aún esposa Elin Nordegren.
Un ex paciente de la Clínica Pine Grove, donde el golfista está en tratamiento, reveló al diario inglés The Sun que Tiger no puso resistencia alguna para llevar al pie de la letra el tratamiento.
Benoit Denizet-Lewis, un adicto al sexo que está en recuperación, dijo que una fuente que está enterada del tratamiento de Woods confirmó que el golfista se encuentra en la clínica Servicios de Adicción y Salud Conductual Grove en Hattiesburg, Mississippi.
Entre las primeras lecciones que recibirá Wood, según comentó Denizet-Lewis, será entender que la adicción al sexo, que usualmente es cuestionada, es muy real.
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