Joan Laporta por fin pudo anunciar que Pep Guardiola será el entrenador del Barcelona la próxima temporada. En una multitudinaria rueda de prensa, en la que además del presidente y del entrenador también estaban Txiki Begiristain y Rafael Yuste, confirmó el acuerdo: "Estamos aquí para anunciar que Guardiola será el entrenador del primer equipo del Barça la próxima temporada".
El máximo mandatario azulgrana, además de anunciar el acuerdo para renovar el contrato del técnico por una campaña, desveló que el contrato se redactará después de las elecciones a la presidencia del club, previstas para primavera: "El nuevo presidente y Guardiola acordarán los términos y condiciones del mismo".
El presidente del Barcelona desveló que se reunió este martes por la tarde con el técnico azulgrana, quien le comunicó "su compromiso" de seguir al frente del equipo "al menos una temporada más". Sin embargo, el nuevo contrato de Guardiola se elaborará y redactará después de las elecciones a la presidencia del club, que se celebrarán la próxima primavera. "El nuevo presidente del Barça y el Pep acordarán los términos y condiciones del mismo", confirmó el propio Laporta, quien cree que la futura renovación del técnico debe considerarse como "un título más" para la entidad.
Guardiola, que las últimas semanas había reiterado su deseo de no negociar su renovación en mitad de la temporada, reconoció que la eliminación en la Copa del Rey y el hecho de que su futuro estuviese monopolizando la actualidad azulgrana ha precipitado la decisión de anunciar su continuidad. "No quería tener la sensación de que estoy aquí por lo que hemos hecho sino por lo que puedo hacer en un futuro, por eso quería esperar. Pero la situación se había vuelto muy incómoda para todos, y como yo me veía con fuerzas de seguir, por eso lo hemos hecho ahora", explicó.
El club quería arrancar de Guardiola "un compromiso por años", según desveló Begiristain, pero el de Santpedor no quería comprometerse más allá de la próxima campaña. "En este sentido, entendemos perfectamente su voluntad", añadió el secretario técnico.
No obstante, el técnico catalán no descarta negociar con el próximo presidente del Barça una contrato que le ligue a la entidad más allá del 30 de junio de 2011, aunque ha dejado claro que no es partidario de firmar contratos largos. "Lo hablaremos en su momento (la posibilidad de firmar por más de una temporada); ahora no creo que sea importante. El entrenador del Barcelona tiene que estar con contratos cortos. Cuando uno es entrenador del Barça ya sabe que en mejor sitio que éste no puede estar, así que seguir aquí es algo que se lo tiene que ir ganando", argumentó.
Lo que sí que quiso dejar claro Guardiola es que en ningún momento se había planteado marcharse del club y mucho menos dejar de entrenar, pues se encuentra motivado, cuenta con el apoyo de su familia y su labor al frente del conjunto azulgrana no le ha desgastado tanto como muchos piensan.
"A veces parece que soy el único entrenador del mundo que trabaja, y todos los entrenadores del mundo trabajan muchísimo", apuntó Guardiola, quien adelantó, no obstante, que no piensa asumir más responsabilidades en la parcela deportiva con la más que posible marcha de Begiristain a final de temporada, "sencillamente porque ya no puedo hacer más cosas".
Pep Guardiola fue el auténtico protagonista de un acto que dejó pequeña la sala de prensa del Camp Nou. "Sé que tarde o temprano dejaré de ser entrenador del Barça y que en ningún sitio estaré como aquí", concluyó Guardiola, quien dijo tomar esta decisión "convencido", pero no quiere que este acuerdo verbal con Laporta ate de pies y manos al nuevo presidente. ¿Qué ocurriría, por tanto, si el presidente entrante no contase con él? "Se ahorraría el dinero. Yo sólo cobro si trabajo", sentenció Guardiola, quien ha vinculado su renovación a la de su ayudante, Francesc 'Tito' Vilanova, "porque si él no sigue yo tampoco".
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