La goleada alcanzada anoche supone un balón de oxígeno para el entrenador Manuel Pellegrini, cuestionado prácticamente desde que accedió al banquillo blanco y que había vivido una semana especialmente dura tras la derrota sufrida por el equipo en Lyon.
El Villarreal dio una nueva alegría al técnico chileno, que ha totalizado los seis puntos en los dos enfrentamientos ante su ex equipo. Pellegrini puede respirar tranquilo hasta la disputa del encuentro de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones. Hasta que se produzca la visita del Olympique de Lyon al Santiago Bernabéu, el entrenador chileno estará menos presionado, y más si el equipo muestra la pegada de anoche, pero el desenlace de los octavos de final marcará el futuro inmediato del cuestionado técnico blanco, que difícilmente aguantaría un KO del Real Madrid en los octavos de final de la Liga de Campeones por sexta temporada consecutiva.
Tras la conclusión del encuentro, el director deportivo Jorge Valdano echó un cable a Pellegrini, señalando que “por el entrenador respondió el equipo, estoy muy satisfecho con el juego. Tuvo paciencia para elaborar y supo aprovechar los espacios que dejó el rival al estar por detrás en el marcador”. Valdano, sobre la situación del mister, se mostró esquivo: “No quiero entrar en debates. Haber marcado seis goles, que pudieron ser más, habla del estilo del equipo y del estilo del entrenador”.
Pellegrini, por su parte, tampoco quiso alimentar el debate: “No hago comentarios, no hay ningún juicio ni el público está agresivo contra nadie. Desde que estoy aquí hay un gran apoyo al trabajo que estoy realizando”. Sobre algunas críticas duras que recibe, el técnico chileno apuntó que “cada persona califica los partidos y hace las portadas como cree conveniente”. Pellegrini se mostró satisfecho con la goleada “porque era importante salir fuerte anímicamente después de la derrota en Lyon y el equipo ha respondido muy bien”.
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