DUNGA CASTIGA A RONALDINHO

Dunga no cuenta con Ronaldinho Gaúcho y sigue preocupado por su permanente estado de crisis. Es cierto que el seleccionador saltó al ruedo para aparentemente echarle un capote y exigir, públicamente, “respeto” para el jugador. Pero discurso oficial al margen, las palabras y, sobre todo, las decisiones del técnico dejan entrever que ahora mismo ‘Ronnie’ está muy lejos de la ‘seleçao’ y, por extensión, del Mundial 2010.

El técnico considera que el propio jugador es quien tiene que coger el toro por los cuernos si realmente desea protagonizar una resurrección futbolística, que viene posponiéndose desde hace tres años. “Creo que es él el que tiene que elegir el camino que le haga sentirse mejor, donde tenga las mejores condiciones”, explicó. “Lo importante es que se sienta bien consigo mismo, y tenemos que respetarlo por todo lo que ha hecho”, añadió.

El seleccionador reconoció, sin tapujos, que el jugador ‘rossonero’ está lejos de su mejor versión, y que necesita ayuda externa para resurgir. “No estoy pidiendo que dejen de criticar a Ronaldinho, lo que no puede ocurrir es que se creen noticias, se tiene que tener respeto y pasar tranquilidad para que vuelva a ser aquel jugador que todos conocemos, es un gran ídolo del fútbol brasileño y un futbolista con una calidad excepcional, es necesario ayudarle y no colocar noticias negativas sobre él a todo momento”, indicó.
Dunga fue el primer técnico que se atrevió a sentarle en el banquillo y despojarle, en marzo de 2007, del ‘10’ en la ‘seleçao’. Desde entonces, la relación entre ambos ha tenido sus puntos álgidos y bajos, como la renuncia de Dinho a participar de la Copa América 2007.

El año pasado, el presidente de la CBF, Ricardo Teixeira, impuso la presencia de ‘Ronnie’ en los Juegos de Pekín, pero su aportación fue un fracaso. Su última actuación con la ‘canarinha’ es del pasado 1 de abril cuando jugó los ‘minutos de la basura’ en la victoria (3-0) ante Perú, en Porto Alegre. Desde entonces, nunca más se supo de él. El tiempo ha acabado dándole la razón al técnico gaúcho y, actualmente, nadie le discute la no convocatoria del ex número 1 del mundo.

‘Ronnie’ está fuera de los planes de la CBF y Dunga. Ni tan siquiera entró en la lista para los intrascendentes encuentros ante Bolivia y Venezuela que cerrarán la fase de clasificación para el Mundial. Ni las bajas de Robinho y Julio Baptista, por lesión, ni tan siquiera el hecho de llamar a dos futbolistas más (24 en lugar de 22) sirvieron para que Ronaldinho tuviese una plaza. El técnico viene apostando en las últimas convocatorias por Elano (Galatasaray) y Ramires (Benfica), y, en esta ocasión, hasta Alex (Spartak Moscú) le ha pasado delante. Dunga se ha cansado de darle oportunidades en los tres años que lleva al frente de la ‘canarinha’, y Ronaldinho no ha respondido. El crédito se le ha agotado, como ya sucediera en Barcelona. El único que apuesta ciegamente por él es Silvio Berlusconi, pero ¿hasta cuándo?


La afición del Corinthians pide a Ronaldinho
El proyecto de futuro del Corinthians pasa por el fichaje de un crack de talla mundial para celebrar sus cien años de existencia. Tras incorporar a sus filas nada menos que a Ronaldo, hace un año, ahora la directiva del club paulista trabaja con la idea de que Ronaldinho o Juan Román Riquelme se enfunden la camiseta del ‘Timao’ en lo que sería la mejor operación de marketing en el año del centenario de la entidad. La apuesta, además, está dirigida a reforzar la plantilla ante su participación en la Copa Santander Libertadores que el Corinthians tiene asegurada por su condición de campeón de Copa de Brasil.
Pese a que Riquelme tiene muy buen cartel en Brasil por sus actuaciones con Boca Juniors en la máxima competición continental contra clubs de ese país, los ‘torcedores’ del Corinthians se decantan por la repatriación de Ronaldinho. En una encuesta realizada por la edición on line de la revista ‘Placar!’, un 62 por ciento de sus lectores se decantaron por el Gaúcho y sólo un 38 por ciento por Riquelme al ser preguntados sobre sus preferencias como nuevo jugador del equipo paulista.