Monterrey debutó con una derrota en la Copa Santander Libertadores. El Campeón de México que vive su segunda experiencia en el Torneo sudamericano más importante, enfrentó su primer compromiso frente al São Paulo de Brasil con un equipo “B”, pues decidió darle preferencia a la Liga donde enfrentará el Clásico Regio ante Tigres, el próximo domingo.
El cuadro dirigido por Víctor Manuel Vucetich pagó la osadía de pisar el Estadio Morumbí con un equipo alterno y terminó cayendo 2-0 después de cometer errores importantes en la última línea.
El equipo regio aunque por momentos intentó jugarle del tú a tú a los brasileños, no contó con idea y profundidad pues sus llegadas al área rival siempre fueron débiles.
Ahora los Rayados tendrán que replantearse la situación y entender que si quieren ser un digno rival habrá que echar mano de sus mejores piezas. Su siguiente duelo será el 24 de febrero en casa ante Nacional de Paraguay; mientras que São Paulo visitará al Once Caldas de Colombia.
São Paulo y Once Caldas tienen tres puntos, mientras que Monterrey y Nacional de Paraguay no lograron sumar en el primera ronda del Grupo 2.
EL PARTIDO
Sólo había que guardar la tranquilidad, tratar de manejar el juego y buscar en algún momento sorprender para robar los tres puntos al São Paulo de Brasil en su casa.
Pero Monterrey tuvo el descuido más caro que pudo lograr cuando Washington Stecanela le ganó la espalda a Diego Cervantes y el paulista empujó el balón en la red.
Era apenas el minuto 12, los Rayados habían dado muestra de solidez, de querer jugar al tú por tú y no achicarse, pero São Paulo a velocidad les demostró que en el Estadio Morumbí hay que tenerles respeto.
Marcelo dos Santos abrió para la izquierda el esférico a Jorge Wagner, quien recibió y de inmediato levantó la cara para servir ante la llegada de Washington Stecanela, el delantero brasileño era custodiado por Diego Cervantes quien ante la velocidad de la jugada nada pudo hacer para evitar la caída de su arco.
Tras la diana recibida, el equipo alterno de Monterrey entendió que la velocidad de los brasileños y los pases rápidos y certeros serían su gran pesar en el juego.
Los paulistas tomaron confianza y lograron llegar en un par de ocasiones con solidez, pero el portero Omar “Gato” Ortiz apareció bajo los tres postes rayados y le impidió a Washington Stecanela y Hernanes de Carvalho festejar el segundo tanto.
Omar “Gato” Ortiz poco a poco le fue dando seguridad a su cuadro y los regios comenzaron a soltarse, pero en los primeros 45 minutos le costó demasiado llegar con el balón controlado hasta el área enemiga para originar verdadero peligro.
Entonces los locales comprendieron que era momento de hacerle más daño a los regios y cuando el Silbante decretó que había que cobrar un tiro libre en los linderos del área de La Pandilla a los 57, el arquero Rogério Ceni corrió hasta el esférico, lo midió y disparó haciendo que el balón hiciera una pequeña comba que obligó a l meta “Gato” Ortiz a estirarse lo suficiente para evitar el gol y mandar a tiro de esquina.
Pero el segundo gol estaba muy cerca de caer y aunque Monterrey trató de hacer cambios que le dieran un rostro diferente, Washington Stecanela volvió a ser el hombre de peligro cuando en un tiro de esquina al 75’, empujó el balón sin ningún problema pues la marca de los Rayados fue más que deficiente. Así São Paulo logró conseguir un contundente 2-0.
EL ARBITRAJE
Sergio Pezzotta. Bueno. El silbante no se metió en problemas, estuvo siempre cerca de las jugadas y logró que el partido tuviera buen ritmo.
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