Iker Casillas cumplirá este sábado en Chapín 500 partidos oficiales con el Real Madrid. Una cifra redonda y una evidente carga simbólica para un futbolista de tan corta edad -28 años hasta el próximo mes de mayo- y que, además, ocupa la posición más longeva en el mundo del fútbol: la de guardameta.
Casillas presenta una regularidad apabullante desde que en la temporara 1999/2000 se asentara como portero del conjunto madridista. Iker llega a esta cifra 10 años después de su debut en San Mamés.
El guardameta del Real Madrid sólo vio comprometido su puesto en la campaña 2001/2002, cuando Vicente del Bosque lo relegó a la suplencia para otorgar el simbólico dorsal número 1 a César Sánchez. Poco a poco, Casillas va aumentando su currículum y situando su nombre en lo más alto de casi todas las listas. Raúl y Zubizarreta son sus próximos retos a alcanzar en la clasificación de partidos oficiales.
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