El fastidio de Dunga era palbable cuando le caían preguntas sobre la actual forma de jugar de Brasil y le recordaban que el gran Franz Beckenbauer consideraba que los brasileños carecían del suficiente poder de fuego para encarar la próxima Copa Mundial.
Exasperado, el técnico brasileño sacó a relucir las estadísticas: "ahí están los números y no hay argumentos que puedan contradecirles".
Luego de vencer a Estados Unidos viniendo de atrás, Brasil se adjudicó por tercera vez el título de la Copa Confederaciones y se apuntaló nuevamente como el equipo a vencer cuando regrese a Sudáfrica para disputar el Mundial en busca de una sexta corona.
Los de Dunga desembarcaron en Sudáfrica como nuevos líderes de las eliminatorias sudamericanas, entonados por una victoria a domicilio sobre Uruguay en el estadio Centenario de Montevideo, la primera ahí en tres décadas.
En la Copa Confederaciones, Brasil fue arrolladora por momentos, como en ocasión del 3-0 que le endosó a la campeona mundial Italia en la primera ronda, pero desentonó en otros. Sufrió para vencer 4-3 a Egipto en su debut, se sacudió de Sudáfrica en las semifinales con un gol sobre el final y en la definición contra Estados Unidos revirtió un 2-0 en contra.
"Hemos demostrado que somos un equipo con la personalidad que se necesita para superar situaciones adversas", dijo el arquero Julio César.
Los números, como dice Dunga, justifican plenamente la consagración: Brasil ganó sus cinco partidos, fue el equipo más goleador del torneo con 14 tantos, rayando el promedio de tres por duelo.
Fue el segundo título relevante que consigue Brasil con Dunga como técnico tras ganar la Copa América hace dos años.
Ahora, el desafío del técnico será evitar que se repita el decepcionante desenlace del Mundial de Alemania 2006, en el que Brasil pegó la vuelta al sucumbir frente a Francia en los cuartos de final, apenas un año después de haber arrasado a Argentina en la final de la anterior Confederaciones.
Carlos Alberto Parreira era entonces el técnico y se le criticó por darle demasiadas libertades al grupo.
Dunga, con fama de disciplinario, fue nombrado para poner orden, pero desde el primer día se le ha cuestionado por sacrificar la vistosidad de la "canarinha" a favor de los resultados.
A Dunga le resbalan tales comentarios.
"Sabemos que hay gente que no ha entendido nuestra forma de entrenar estos días, pero alcanzamos la final de este torneo", fue el recado de Dunga a sus detractores.
En sus comparacencias ante los medios, el capitán de la selección que en Estados Unidos 1994 alzó su cuarta corona alabó sin cesar la solidaridad, oficio y seriedad del equipo que dirigió en las últimas semanas.
"Este es un grupo de jugadores comprometidos", afirmó. "Trabajan duro y no se amilanan nunca ... Somos capaces de hacerlo mejor".
Dunga ha insistido en que no va a repetir lo hecho por Parreira, quien prácticamente armó la selección que jugó el pasado mundial con más de un año de anticipación. Salvo Kaká, nadie tiene un puesto asegurado.
Pero la Confederaciones demostró que Brasil tiene una base que muy difícilmente alterará, desde Julio César codeándose entre los mejores arqueros del mundo hasta un centrodelantero como Luis Fabiano que se consagró como el máximo cañonero del torneo. El talón de Aquiles parece estar en la falta de creatividad en el mediocampo.
"Esperamos que nuestro estatus de favoritos sea justificado", afirmó Kaká.
Monday, June 29, 2009
BRASIL ES EL FAVORITO PARA GANAR EL MUNDIAL 2010
Etiquetas:
Brasil,
Campeones copa confederaciones.,
Copa del mundo,
Dunga
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment