No es de extrañar que Tiger Woods haya cargado su yate de lujo, que tenía amarrado en North Palm Beach, y haya decidido pasar las vacaciones bien lejos de casa. Según publican diversas webs estadounidenses, rumbo a Bahamas, acompañado por amigos del mundo del golf, para poder desconectarse de la avalancha de bromas a su costa y de los que quieren sacar tajada de sus infidelidades... Además de poner tierra de por medio entre él y una de sus amantes, Rachel Uchitel, que ha llegado a Palm Beach supuestamente para unas vacaciones familiares, pero cuya presencia paseando por las playas de la zona ya ha puesto en alerta a los ‘paparazzis’. Sin olvidar que tendrá que digerir el rapapolvo que recibió hace unos días de su madre, Kultida, que voló desde Los Angeles para que su hijo comprobara lo dolida, enfadada y decepcionada que está por su comportamiento al tiempo que quiso estar junto a su nuera, Elin, y sus nietos, Sam y Charlie, a los que adora.
Una marca de preservativos con su imagen (como en su día Barack Obama, John McCain o Sarah Palin); una curiosa tarjeta de navidad que circula por la red; un juego virtual en el que es perseguido por su esposa y, al estrellarse, ser golpeado con un palo de golf hasta que sangra... Estas son algunas de las ‘chanzas’ del momento pero hay más. En enero saldrá a la luz una parodia de las ‘hazañas’ sexuales del golfista en una película para adultos, titulada ‘Tiger’s Wood’ (‘La madera del Tigre’), un juego de palabras con su nombre, que empezó a producirse apenas dos semanas después de aparecer los nombres de las amantes del golfista. Y la más reciente, una tarjeta navideña en la que se ve a Tiger rodeado de varias de sus supuestas amantes haciendo ‘topless’.
Tampoco la esposa de Woods está para muchas más tonterías. Ha decidido pasar las Navidades con su familia, en Suecia, y en la prensa sensacionalista británica se especula con un posible encuentro secreto con una mujer muy conocida que ha pasado por su misma situación y ha podido salvar su matrimonio. Se trata de Victoria Beckham. Al parecer, Elin Nordegren era reacia a ese encuentro pero sus amigos la han convencido de que hable con la ex Spice pija, capaz de superar una infidelidad de su esposo David, que llegó a ser motivo de debate y también de chanza en nuestro país.
Su popularidad desciende y sus patrocinadores siguen huyendo
Corey Pavin, capitán de la Ryder Cup, le apoya; Donald Trump quiere que le ayude a diseñar uno de sus hoteles en un Golf Resort. Incluso la marca de relojes Tag Heuer dio marcha atrás y, dicen en su web, “nuestra colaboración con Tiger Woods seguirá... pero reduciremos el uso de su imagen en ciertos mercados y durante un período de tiempo, dependiendo de cuándo vuelva”. También le siguen apoyando dos tercios de la población negra encuestada en Estados Unidos para conocer el grado de popularidad de sus famosos. Pero Woods ha pasado del 60 por ciento de que gozaba tras conocerse su accidente de coche, al 38 por ciento actual. Accenture, consultoría y correduría de seguros, y AT&T, compañía de telefonía más importante de EE.UU., han decidido prescindir de sus servicios
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